Notas de prensa

Global Humanitaria, a través de su contraparte en India, BSSK, está atendiendo a los damnificados por el ciclón Alía en el área de Calcuta y los Sunderbans, y efectúa un llamamiento a la colaboración ciudadana para poder atender con rapidez las necesidades de esta emergencia.

El pasado 25 de mayo, el ciclón Alia golpeó el cinturón costero de la provincia india de Bengala Occidental. Las fuertes lluvias asociadas al ciclón han causado la muerte de al menos 191 personas y dejado sin vivienda a unas 200.000 más en el este de la India y en Bangla Desh.

Un equipo de BSSK ha podido acceder desde Calcuta a la zona de los Sunderbans, en el Delta del Ganges, y ha hecho una primera entrega de alimentos, medicinas y jabón en la isla de Kumirmari. El temporal ha arrasado casas y cortado las comunicaciones. No se sabe con seguridad cuántas personas han muerto en la isla ni cuántas han abandonado sus hogares buscando zonas más seguras.

En los Sunderbans, formados por miles de islas en la desembocadura del río, los vientos destruyeron las viviendas, construidas en madera y palma, y las aguas se han llevado las escasas pertenencias de sus habitantes.

Global Humanitaria se ha sumado a las actuaciones del gobierno indio y de varias entidades para atender las necesidades de la población, que carece de lugares de cobijo, alimentos y agua potable. Durante los próximos días se extenderá el alcance y la cantidad de la ayuda a otros puntos de la isla de Kumirmari y del conjunto de los Sunderbans.

La entidad ha puesto en marcha a través de su web (http://www.globalhumanitaria.org) una campaña de donativos para conseguir fondos adicionales para esta emergencia.

El ciclón ha causado daños severos en algunas escuelas y en un centro médico puestos en marcha por Global Humanitaria. Desde estas instalaciones, en los que la población buscó refugio al perder sus casas, se ha distribuido la primera ayuda de emergencia.


Sin posibilidades de cultivar los próximos años

El viento ha destruido los embarcaderos de las aldeas y la combinación de aguas fluviales y marinas ha superado los precarios diques que las protegen. Además de arrastrar al ganado hacia el Delta, el agua salobre ha arruinado las posibilidades de cultivo durante los próximos dos o tres años, lo que supone que sus habitantes se han quedado sin su medio de vida.

Con el paso de los días y el estancamiento de las aguas, aumenta la preocupación por la proliferación de enfermedades infecciosas. En las últimas horas ya se habían contabilizado más de 5.000 casos de diarrea por consumo de aguas contaminadas y se habían producido los primeros casos de cólera y otras enfermedades.

Desde 2005, Global Humanitaria y BSSK mantienen un programa de desarrollo rural en la isla de Kumirmari, en los Sunderbans, en la que viven unas 16.000 personas dedicadas a la pesca y a la agricultura. Los monzones causan habitualmente inundaciones en la zona, pero los daños causados por Alia no cuentan con precedentes en los últimos años.

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Global Humanitaria es una organización laica y plural que lleva a cabo proyectos de Desarrollo Sostenible y Acción Humanitaria en América Latina, Asia y África con el objetivo de garantizar los derechos de la población infantil y favorecer el desarrollo integral de las comunidades.