A pesar de las restricciones impuestas por el covid y de las consecuencias de los monzones y del ciclón Amphan (que en mayo asoló los Sunderbans) continuamos impartiendo refuerzo escolar a casi 2.000 niños y niñas. El objetivo es mejorar sus competencias en lecto-escritura, matemáticas e inglés En Sunderbans y Murshidabad 57 maestros se desplazan a los hogares de los alumnos para hacer seguimiento , examinar sus avances y ayudarles a mantenerse en la escuela. Para los niños y niñas de nuestras zonas de trabajo eso es complicado. La precariedad y los efectos del ciclón afectaron también su rendimiento escolar d emuchos alumnos.
Con enormes disparidades en cuanto al acceso a Internet y la tecnología, la transición hacia el aprendizaje online no ha sido posible para todos los estudiantes y educadores. La pandemia ha dejado al descubierto la desigualdad de la población, que requiere soluciones políticas, económicas y educativas. Según la UNESCO, 320 millones de estudiantes en la India se han visto afectados negativamente por el Covid-19: el sistema educativo se enfrenta al efecto del cierre de escuelas prolongado sobre el aprendizaje que resultará en una pérdida de capital humano y una disminución de las oportunidades a largo plazo.
Imagen: Un maestro examina el avance de sus alumnos en la isla de Kumirmari, Sunderbans (Global Humanitaria/NIds)