UNICEF y Global Humanitaria han iniciado la inscripción de 6.000 niños, niñas y adolescentes en el registro civil del municipio de San Carlos, en Nicaragua. Este registro permitirá que los menores registrados puedan reclamar y ejercer derechos como la asistencia sanitaria y la educación primaria obligatoria, entre otros.
Medios de comunicación locales cifran en cerca de un millón los niños que en Nicaragua no constan en censo alguno y son invisibles para el Estado porque no fueron inscritos por sus padres.
El proyecto se realiza durante tres meses en escuelas de 81 aldeas del municipio de San Carlos, e incluye la convocatoria mediante medios de comunicación locales en los que se anuncian las fechas de visita a cada una de las comunidades y la importancia del proceso de registro.
Global Humanitaria ha asumido la ejecución, seguimiento y evaluación de este proyecto y se ha coordinado con las instituciones gubernamentales. UNICEF ha financiado la integridad del proyecto como parte de su estrategia de apoyo al registro en las Regiones Autónomas del Atlántico norte y sur, a las cuales pertenece el municipio de San Carlos.
El Registro Civil de Nacimiento es el único documento público que prueba legalmente la existencia de una persona. Permite a sus titulares tener un nombre reconocido por el Estado y posibilita el acceso a las prestaciones sociales, al trabajo y a la vivienda. Por el contrario, los niños registrados no existen ni son sujeto de derechos, lo que les aboca a la marginalidad social.
La falta de registro es un problema relacionado con falta de recursos económicos y de sensibilización sobre la necesidad de registrar los nacimientos. Esta campaña de registro asume estos costes y permite que los adultos inscriban a los menores a su cargo sin necesidad de desplazarse de sus comunidades.
A menudo, la población afectada no tiene posibilidad de pagar el coste del formulario para inscribir a sus hijos dentro del primer año o de desplazarse a la ciudad de San Carlos para registrarlos, y mucho menos costearse los más costosos trámites legales para las inscripciones tardías. Cada uno de estos trámites no puede realizarse por menos de 1.850 córdobas –unos 70 euros, transporte incluído-, lo que representa más del 70% del ingreso medio mensual de las familias de San Carlos, unos 100 euros.
Marginalidad que dificulta el derecho a la identidad
El subregistro en Nicaragua afecta sobretodo a los niños de hasta 15 años con niveles altos de pobreza, pero también a menores de grupos étnicos que no se inscriben por factores económicos, jurídicos, geográficos o culturales y diferencialmente, porque no responden a una noción de país, estado o fronteras nacionales. También los grupos de niños trabajadores y sometidos a explotación sexual en sitios fronterizos y puertos ven vulnerado su derecho a tener una identidad legal.
El problema del subregistro de niños es mundial. Según cálculos de UNICEF, más de la mitad de los nacimientos que se producen en el mundo en desarrollo todos los años (excluida China) no se inscriben, un problema que priva a más de 50 millones de niños y niñas de un derecho básico e inalienable: su reconocimiento como ciudadanos.
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Global Humanitaria está presente en Nicaragua desde 2004. En este país lleva a cabo actividades de promoción al desarrollo en tres municipios, que alcanzan directamente a un mínimo de 8.000 personas