Debido al aumento de los casos de Covid-19, las escuelas vuelven a estar cerradas en el país desde el 22 de marzo por lo que los talleres de lectura y cuentacuentos así como las formaciones dirigidas a docentes y al personal bibliotecario que habíamos empezado a impartir están en pausa temporalmente. Estas acciones forman parte de nuestro proyecto educativo cuyo objetivo es mejorar la lectoescritura de 2.500 escolares de primaria.
Por el momento el gobierno y las comunidades educativas están decidiendo si dar clases en los patios de las casas o en lugares cedidos por las comunidades, a pequeños grupos de estudiantes. Nuestra contraparte, Aredoc, se mantiene en contacto con las 10 escuelas con las que trabajamos, para poder dar seguimiento a las actividades programadas o proponer alternativas
Asimismo, desde diciembre, poco antes del inicio del curso escolar en el país, hemos llevado a cabo la campaña anual de promoción de matriculación en 32 aldeas y repartido útiles escolares en 18 escuelas rurales de Takeo para los 2.500 niños y niñas beneficiarios del proyecto.
Imagen: Alumnas en una de las bibliotecas escolares de Takeo en las que desarrollamos el proyecto (Global Humanitaria/Aredoc)